El Banco de España ha alertado que casi la mitad de las personas que viven de alquiler en España están en riesgo de pobreza debido a los altos precios. Este porcentaje, un 45%, es el más elevado de toda la Unión Europea.
Aumento de la demanda de alquiler y los precios
El informe del Banco de España detalla que entre 2011 y 2021, el porcentaje de hogares españoles que no poseen una vivienda en propiedad aumentó en 4,2 puntos porcentuales hasta llegar al 24,2%, aún por debajo del 34,2% del promedio de la zona euro. Este incremento en la demanda de alquiler ha tenido su reflejo en los precios, poniendo en situación de riesgo de exclusión social a una gran parte de la población.
El perfil del arrendatario en riesgo
El estudio señala que en 2021, el 48,9% de los hogares españoles que residían en viviendas de alquiler estaban en riesgo de pobreza o exclusión social. Este dato contrasta con el hecho de que solo el 21,2% de los hogares europeos en esta misma situación dedica más del 40% de su renta al alquiler.
Además, la demanda de alquiler entre los colectivos con menor renta está vinculada con la situación del mercado laboral y los criterios de concesión de crédito hipotecario. La vivienda en alquiler es mayoritaria entre los trabajadores asalariados sin contratos a tiempo completo y entre los desempleados.
El problema de la vivienda en España es estructural
Ángel Gavilán, director general de Economía y Estadística del Banco de España, advierte que las medidas temporales, como los créditos ICO para las hipotecas, no son una solución definitiva para los desajustes de acceso a la vivienda. Según Gavilán, “es un problema que tiene muchas aristas. No hay ninguna solución que lo resuelva de manera inmediata”.
Efectos adversos de la Ley de Vivienda
El informe también critica la reciente Ley por el Derecho a la Vivienda, alegando que, aunque enfatiza el necesario incremento de la oferta de vivienda en alquiler, podría generar efectos indeseados a medio plazo. El control de rentas, una de las medidas de la ley, puede provocar una reducción del número y de la calidad de las viviendas disponibles en el mercado.
Apoyo a la oferta privada de alquiler
El Banco de España aboga por el apoyo a la oferta privada de alquiler para mitigar el desequilibrio actual entre la oferta y la demanda. Se recomienda evitar medidas que distorsionen las señales de precios, reforzar la seguridad jurídica de los propietarios de vivienda en alquiler y reducir la incertidumbre regulatoria en este mercado.